El Jefe de Estado Mayor de la Defensa (Jemad), el general Miguel Ángel Villarroya, solicitó ayer su cese a la ministra de Defensa, Margarita Robles, tras su polémica vacunación contra el COVID, pese a que defiende que siguió los protocolos establecidos y en ningún momento se aprovechó de “privilegios no justificables”. Fuentes de Defensa aseguraron que la ministra, que le había pedido al Jemad un informe de explicaciones tras enterarse de esta vacunación por la prensa, ha aceptado su renuncia.

El Estado Mayor de la Defensa (EMAD) informó de que el general Villarroya tomó esta decisión “a primera hora” de ayer y “con la conciencia tranquila”. El cese fue trasladado a la ministra del ramo en una misiva en la que sostiene que su actuación como jefe de la cúpula militar, igual que durante sus 45 años de carrera en las Fuerzas Armadas, “ha procurado ser honesta y dominada por el espíritu de servicio y de amor a España”.

Pese a la polémica por su vacunación, el que fue Jemad durante el último año sostiene que la decisión de recibir la vacuna contra el COVID-19 fue “acertada”, pero está “deteriorando la imagen pública” de las Fuerzas Armadas y poniendo en duda su propia “honradez”. Según justifica, la vacunación tuvo lugar “en el cumplimiento de sus obligaciones, de acuerdo a los protocolos establecidos y con la única finalidad de preservar la integridad, continuidad y eficacia de la cadena operativa de las Fuerzas Armadas”.

El general Villarroya fue nombrado jefe de la cúpula militar por Margarita Robles el 14 de enero de 2020, en una de sus primeras decisiones tras la investidura del Gobierno de coalición.

Catalán con una amplia trayectoria en destinos nacionales e internacionales, antes era director del Gabinete Técnico de la ministra, un cargo al que había llegado de la mano de la exministra del PP María Dolores de Cospedal.

El general Villarroya recibió la vacuna contra el nuevo coronavirus junto a otros tantos altos cargos militares dentro del plan de vacunación del EMAD. Según explicaron desde el Estado Mayor, las Fuerzas Armadas tienen asignado por el Ministerio de Sanidad un cupo de vacunas al margen de las que se reparten entre las comunidades autónomas para ser suministradas a la población civil.

El cese del general Villarroya llega después de conocer que el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, decidió el pasado viernes el cese del oficial de la Guardia Civil que hacía de enlace con el Estado Mayor de la Defensa y que también había sido vacunado sin estar en los grupos establecidos.

Puig apoya no dar la segunda dosis a los que se saltaron el plan

El presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, mantiene su opinión de que las personas que se han vacunado de forma irregular en la Comunitat Valenciana no reciban la segunda dosis, aunque señala que será una decisión de Salud Pública. “En este momento de gran escasez de vacunas, la prioridad absoluta son las personas vulnerables y cuando se vacuna por segunda vez a alguien que lo ha hecho de forma irregular se le está quitando la primera vacuna a una persona que es vulnerable y se lo merece”, afirmó ayer. Para Puig, “no se trata de desperdiciar nada, se trata de que aquellas personas que tienen prioridad, la tengan realmente” porque “esa segunda vacuna es la primera de una persona que sí se le pone ahora, tendrá en un mes inmunidad”.