El comité clínico que asesora a la Xunta en la toma de decisiones por la pandemia de COVID se vuelve a reunir hoy y, encima de la mesa, volverá a retomarse el documento con el que trabajó a finales de año 2020, el cual, en esencia, vinculaba las medidas de restricción a la incidencia por cada ayuntamiento. Por ello, se estudiará cómo vincular de nuevo movilidad, horarios de la hostelería y aforos con la situación epidemiológica de cada municipio.

Con la llegada de la desescalada después de las restricciones más duras entre finales de enero y el mes de febrero, Galicia deshizo las almendras municipales y trabajó por áreas sanitarias, de manera que durante el pasado fin de semana la movilidad interna en el territorio gallego fue prácticamente total entre todos los ayuntamientos. Sin embargo, esta situación permite que municipios con incidencia de casi 250 casos por 100.000 habitantes a 14 días tengan las mismas medidas restrictivas que otros que no han registrado ningún contagio nuevo en los últimos siete días, por ejemplo.

El propio conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, avanzó la semana pasada la intención de recuperar el documento con el que se trabajaba antes de Navidad y que contaba con cuatro niveles. Cada uno de estos niveles se regía por una franja horaria para la hostelería, aforos y actividades permitidas. En ese momento, también se había organizado el territorio gallego por almendras de ayuntamientos limítrofes y se llevaron a cabo cierres perimetrales. Actualmente, la Xunta decreta el cierre de ayuntamientos que tienen una incidencia superior a los 500 casos por cada 100.000 habitantes a 14 días o los que con una proyección a 7 días pueden estar en una situación similar, teniendo en cuenta variantes como la cepa británica.

La idea que maneja el comité clínico es estudiar los distintos niveles de restricciones que se pueden aplicar a Galicia en un contexto en el que los datos son favorables pero hay “riesgo” de que se produzca una cuarta ola, como ven los expertos y como previene el médico de Medicina Intensiva y miembro del comité clínico, Pedro Rascado: “A mayor movilidad, mayor riesgo”.