“Los grandes o pequeños avances logrados en Oncología siempre han venido de la mano de la ciencia. Investigar salva vidas, y en una patología con tanta incidencia y repercusión social como el cáncer, es fundamental seguir haciéndolo”. Rosario García Campelo, jefa del Servicio de Oncología del Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac), reivindica la investigación como un eslabón “clave” en la lucha contra el cáncer, no obstante, lamenta lo “complejo” que resulta hacer ciencia en España debido a que “los recursos económicos en la esfera pública”, destinados a ese fin, “son limitados”. Por eso aplaude con entusiasmo el papel de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC), que desde hace medio siglo apoya esa labor a través de su Fundación Científica.

La AECC es la entidad privada que más recursos destina en nuestro país a investigación. Su compromiso es absoluto, y va más allá de ese aporte económico. El apoyo incondicional a los pacientes, su labor en los hospitales o las campañas de prevención que desarrolla son elementos fundamentales de la cadena de cuidado”, subraya la doctora García Campelo, quien llama especialmente la atención sobre el hecho de que los fondos que la AECC destina a proyectos científicos “han sido recaudados gracias a la generosidad de la sociedad”. “Que miles de personas, en toda España, depositen su confianza en la AECC permite a esta asociación brindar un apoyo tan consolidado a la investigación. Esto significa que todos estamos contribuyendo, en mayor o menor medida, en la lucha contra el cáncer”, destaca.

"Los grandes o pequeños avances en la Oncología han venido siempre de la mano de la ciencia"

Rosario García Campelo - Jefa del Servicio de Oncología del Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac)

En un año “tan complicado” como el actual por la crisis sanitaria, económica y social derivada de la pandemia de COVID, la AECC no solo ha mantenido su compromiso con la ciencia. Lo ha reforzado. Prueba de ello es que, solo en la provincia de A Coruña, la entidad ha destinado casi un millón de euros a ayudas a la investigación oncológica, de las cuales tres han ido a parar al Instituto de Investigación Biomédica (Inibic) del área sanitaria coruñesa. Dos al grupo de Plasticidad y Epitelial (EpMet), que dirige la doctora Angélica Figueroa, y una al grupo de Oncología Clínica, que lidera la propia doctora García Campelo.

La beneficiaria de esta última ayuda es Nieves Martínez Lago, oncóloga médica del Chuac, quien “como especialista del siglo XXI” considera que, “hoy en día, no se concibe una práctica clínica de excelencia sin el conocimiento de las bases moleculares” del cáncer. “Y sin un diagnóstico, pronóstico y tratamiento basado en los marcadores moleculares de cada paciente, lo que entendemos como medicina personalizada”, destaca la doctora Martínez Lago, quien resalta que realizar un máster en Oncología Molecular le permitirá “completar conocimientos sobre metodología de investigación básica y clínica y patrones de expresión fenotípica”, así como “otros abordajes terapéuticos basados en vías moleculares implicadas en la carcinogénesis [el proceso por el cual se produce el cáncer]”.

Andrea Rodríguez Alonso es otra de las receptoras de las ayudas a la investigación concedidas este año por la AECC en la provincia coruñesa, un aporte económico que, en su caso, le permitirá realizar la tesis doctoral en el EpMet. “Mi proyecto se enmarca en el estudio del mecanismo de acción de pequeñas moléculas antitumorales dirigidas contra la actividad de una proteína concreta denominada Hakai. La metástasis es responsable del 90% de las muertes por cáncer en tumores sólidos, y nuestro grupo ha demostrado que Hakai tiene una importante acción en la formación y crecimiento de tumores, la capacidad invasiva y la formación de metástasis”, explica Rodríguez Alonso, quien especifica que, el siguiente paso, es “analizar el mecanismo de acción por el cual los inhibidores de Hakai son capaces de bloquear su actividad”. “En consecuencia, estudiar la acción sobre la progresión tumoral, la metástasis, así como en la adquisición de resistencia a fármacos, particularmente, en el cáncer de colon”, señala.

La estudiante Lía Jove Filgueiras es la beneficiaria de la tercera ayuda a la investigación de la AECC en la provincia coruñesa que este año ha ido a parar al Inibic. En su caso, el apoyo económico de la asociación le brindó la posibilidad de realizar sus prácticas, también en el EpMet, durante los meses de agosto y septiembre. “Esta oportunidad me permitió familiarizarme con la actividad desarrollada en un grupo de investigación especializado en el área del cáncer y adquirir experiencia en técnicas básicas de biología molecular y celular”, refiere Jove Filgueiras, quien además subraya que la posibilidad de llevar a cabo esas prácticas al terminar el doble grado en Biología y Química le sirvió “para poder valorar y tomar la decisión de continuar” su formación “ligada a la investigación contra el cáncer”.

“Necesitamos hechos concretos; que la clase política entienda que la investigación es valor social, económico y cultural para un país, más allá de un momento de pandemia”

Rosario García Campelo - Jefa del Servicio de Oncología del Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac)

La doctora Rosario García Campelo reivindica, en este punto, que “lo bueno de las ayudas de la AECC es que permiten llevar a cabo grandes proyectos de investigación”, pero también “retener talento, e incluso fomentarlo”. “Van dirigidas a todas las esferas de la investigación: la clínica, la básica... Abarcan investigaciones muy potentes, pero también buscan fomentar el interés científico, de hecho, en sus convocatorias hay muchas ayudas orientadas a esto”, explica la responsable del Servicio de Oncología del Chuac, quien lamenta que “España forme a grandes científicos y clínicos”, y estos se vean muchas veces “obligados a tener que marcharse” por la falta de inversión pública en ciencia.

Preguntada, a este respecto, sobre si confía en que la pandemia de COVID sea un punto de inflexión que impulse el desarrollo científico en España, la doctora García Campelo responde que, aún siendo “optimista por naturaleza”, le gusta ver “hechos concretos”. “Y más allá de las promesas que se pueden lanzar en un momento tan complicado como el que hemos vivido por la pandemia de COVID, lo que necesitamos ahora son acciones concretas. Que la clase política entienda de una vez por todas que la investigación es valor para un país, no solo en un momento de emergencia sanitaria. Que es valor cultural, social y económico y que, sin investigación, no hay futuro”, reivindica la jefa de Oncología del complejo hospitalario coruñés, quien recuerda que España está “muy lejos” de estados de su entorno, como Francia o Alemania, en inversión pública en investigación”. “Por tanto, optimismo sí, pero queremos hechos concretos”, reitera.