Treinta prelados y un cáliz del siglo XIII, en la toma de posesión del nuevo arzobispo de Santiago

Arturo Reboyras

La toma de posesión de un arzobispo siempre se contempla como un acto histórico, pero cuando han pasado 27 años y 98 días desde la última, la ceremonia se convierte en todo un acontecimiento. Santiago vivirá hoy la inauguración del ministerio episcopal de monseñor Francisco José Prieto Fernández, y lo hará en el marco de una celebración como la que no tenía lugar en la ciudad del Apóstol desde el 25 de febrero de 1996, cuando monseñor Julián Barrio Barrio asumió la Mitra compostelana. Así, hasta convertirse la Archidiócesis santiaguesa en la que más tiempo lleva sin acoger la toma de posesión de un obispo titular, explica Ecclesia.

Tanto el Cabildo como la Curia diocesana se ha esforzado en cuidar todos los detalles de la ceremonia que se celebrará hoy, a partir de las 10.45 horas, en la seo metropolitana. Entre los más de 30 obispos de toda España que han confirmado su asistencia, destaca la presencia del nuncio de su santidad el Papa en España, monseñor Bernardito Auza, quien dará posesión al nuevo titular de su sede. Además, en la ceremonia también participarán unas 800 personas, entre autoridades, invitados y fieles que se han inscrito para asistir al acto histórico. La celebración solemne estará precedida por el toque manual de campanas, el tradicional repique francés, junto con otros toques de carácter festivo, que correrá a cargo de la Asociación Cultural Campaneiros de Galicia.

Como es tradición, el nuevo arzobispo será recibido por el Cabildo catedralicio en la puerta del Obradoiro. El nuncio se encargará de presentarlo a los capitulares y también al Colegio de Consultores de la Diócesis. A continuación, el deán le dará a besar una reliquia del Lignum Crucis. En esta ocasión, será la conocida como Cruz patriarcal de Jerusalén, que se conserva en el Tesoro de la Catedral.