Investigada la presunta violación grupal a una joven junto a un discoteca en Valencia

Los sospechosos, entre tres y cinco, se fueron del lugar en el coche de uno de ellos

Teresa Domínguez

Un juzgado de Valencia está investigando la violación grupal denunciada el pasado fin de semana por una chica de 18 años, en la que habrían participado entre tres y cinco hombres jóvenes y que se produjo sobre las cinco y media de la madrugada del sábado pasado en el valenciano barrio de la Malvarrosa, en un descampado ubicado frente a un cuartel de la Guardia Civil y junto a una discoteca, local del que procedían todos los implicados. La Policía Nacional trata de identificar a los presuntos implicados en esta nueva agresión sexual en manada. Ya tomaron declaración a testigos de parte de los hechos, entre otras gestiones.

La víctima explica en su denuncia que había accedido a salir con uno de ellos, pero que una vez en el aparcamiento llegaron los otros. Luego, empezó a sentirse mal y acabó sufriendo una agresión sexual grupal bajo la coacción de verse rodeada por el grupo de jóvenes.

Según dijeron inicialmente algunos testigos, que afirmaron desconocer que la chica necesitase ayuda así que no acudieron a prestársela, vieron al grupo con globos en las manos, lo que les hizo pensar que estaban consumiendo el llamado ‘gas de la risa’, de moda desde hace unos años en toda Europa. Se trata de una sustancia con propiedades sedativas y analgésicas de larga tradición en el uso médico, principalmente en el ámbito odontológico, que, entre otros, produce pérdida de conciencia y problemas en el equilibrio cuando se inhala. La joven declaró haber consumido, además, alcohol y cocaína, al igual que el resto, por lo que los efectos del óxido nitroso pudieron verse potenciados por el primero.

Al parecer, la agresión habría continuado después en el interior del vehículo de uno de los implicados. Cuando los jóvenes se fueron en su coche, la chica pidió ayuda a un hombre, que además le prestó su teléfono móvil para llamar a la amiga con la que había salido de fiesta. Ambas llamaron a la madre de la segunda chica y las tres acudieron, alrededor de las siete de la mañana del sábado, a un hospital de la ciudad de Valencia, donde la joven fue explorada por la ginecóloga de guardia y por un forense, siguiendo el protocolo.