Sanidad animal

Los veterinarios, en alerta por el 'covid de las vacas' que se extiende "de forma muy rápida por Europa"

La enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE), que ya tiene focos en todas las comunidades autónomas, mantiene en alerta a los profesionales

Una explotación ganadera.

Una explotación ganadera.

Nieves Salinas

La enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE), la conocida como 'covid de las vacas', ya tiene focos en todas las comunidades autónomas, lo que mantiene en alerta a los veterinarios. Además de en España, está presente en Portugal, Italia, Francia y Suiza. "Se está extendiendo de forma muy rápida; ahora han empezado a llegar los fríos y es posible que se frene, pero lo normal es que el año que viene se siga expandiendo y, al igual que la lengua azul, acabe afectando a toda Europa", augura Christian Gortázar, catedrático de Sanidad Animal en la Universidad de Castilla-La Mancha, a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA, del grupo Prensa Ibérica. Sin embargo, manda un mensaje de esperanza a los ganaderos: "No es algo imposible, manejando con cuidado a los animales, se puede superar el problema".

Aunque no se trata de una zoonosis que pueda contagiar al ser humano hasta ahora, la Organización Colegial Veterinaria (OCV) ha advertido que esta patología de origen vírico infecciosa, que se ceba tanto en rumiantes domésticos como en ciervos, gamos y corzos -aunque no todos los animales infectados desarrollan la enfermedad, precisa el órgano colegial-, confirma "el estrecho vínculo" entre fauna silvestre y ganadería extensiva.

Un año de los primeros casos

En verano, el Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC) emitía un comunicado sobre los aspectos fundamentales de la enfermedad hemorrágica epizoótica. En noviembre de 2022 se detectaron los primeros casos en España, en la provincia de Cádiz. La enfermedad es causada por un virus, concretamente un Orbivirus emparentado con el virus que causa la lengua azul (LA).

La EHE es más común en América, pero se ha expandido a muchas otras regiones del globo

Los virus de la EHE y la lengua azul se transmiten por dípteros del género Culicoides, insectos hematófagos de pequeño tamaño y que pueden ser arrastrados por fuertes vientos y, con ello, vehicularlos entre zonas geográficamente muy distantes. La EHE es más común en América, pero se ha expandido a muchas otras regiones del globo. Llevaba años circulando en el norte de África, por lo que no sorprende su aparición en la orilla norte del Mediterráneo, señala este organismo.

Cabaña de vacuno

La expansión de la EHE durante el verano por varias provincias del país con cabaña de vacuno en régimen extensivo tenía su origen en el elevado número de animales silvestres, como ciervos, que en esa época, por la escasez de alimento, presentan un sistema inmunitario debilitado y, por eso, propenso a contraer enfermedades.

Ciervos en la montaña palentina.

Ciervos en la montaña palentina. / Somospalencia.es

Si entonces, la OCV señalaba que la enfermedad tenía focos en siete comunidades, ahora se ha extendido por toda España, advierten a este diario desde el órgano colegial que, recuerda, "es un ejemplo claro de la emergencia y expansión de las enfermedades transmitidas por un vector presentes ya en España como consecuencia del cambio climático".

Materia orgánica

"La enfermedad se transmite por Culicoides, un grupo de dípteros que no son mosquitos, y estos 'dipterillos' necesitan dos condiciones para reproducirse: una, que haya mucha materia orgánica en algún sitio (las larvas crían en suelo rico en materia orgánica) y dos, que haya humedad, pero además que exista una temperatura razonable para que ellos puedan criar", explica el catedrático Christian Gortázar.

El experto precisa: "Normalmente, esas condiciones, en cualquier sitio, se dan sobre todo a finales de verano, principios de otoño, que es cuando se junta el que haga todavía calor con las primeras lluvias. En ese momento se produce un pico de población de dípteros". Este año, añade, se ha dado un episodio "raro, que no del todo anormal, que es que en junio ha llovido mucho y, esas lluvias fuertes, han determinado que los Culicoides, en vez de circular solamente a finales de verano o principios de otoño, de repente han circulado todo el verano".

"Tenemos un régimen de temperaturas y lluvias que no es el estándar y que, en este caso, han favorecido la presencia del vector", explica Gortázar

Gortázar, uno de los científicos con mayor reconocimiento en enfermedades en animales silvestres y zoonosis, indica que se han creado "unas condiciones excepcionales que han favorecido muchísimo la difusión de la infección. Entonces, ¿eso es cambio climático?Son circunstancias un poco casuales, pero, en el fondo, tenemos un régimen de temperaturas y lluvias que no es el estándar y que, en este caso, han favorecido la presencia del vector".

Control de los animales

El catedrático explica que la inmensa mayoría de los animales que se infectan ni siquiera tienen síntomas y, además, van a quedar protegidos. "Una vez infectados van a desarrollar anticuerpos que, en principio, son neutralizantes durante mucho tiempo, es una protección bastante duradera. Pero, dependiendo de la ganadería y de una serie de circunstancias, puede haber una mortalidad que, en algunos casos excepcionales, puede llegar a ser relativamente elevada".

Cantabria, País Vasco y, ahora, Castilla y León, ya han puesto en marcha medidas de compensación para los ganaderos

Eso "lógicamente" es una pérdida importante de animales y la mayor pesadilla para los ganaderos. En algunas comunidades, como Cantabria, País Vasco y, ahora, Castilla y León, abunda, ya han puesto en marcha medidas de compensación que cubren, en algunos casos, los tratamientos veterinarios que se tienen que hacer a las vacas que tienen signos de enfermedad -antiinflamatorios, etc.- y, en otros casos, por el fallecimiento de los animales, una compensación -total o parcial- "para mitigar el golpe".

Un veterinario que vacuna contra la lengua azul.

Un veterinario que vacuna contra la lengua azul. / Carlos García

Precisamente, los veterinarios de Castilla y León y Castilla-La Mancha se reunían el pasado fin de semana en Segovia en un encuentro de trabajo para analizar, entre otras cuestiones, la lucha contra la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica o la figura del veterinario de explotación.

El papel de los veterinarios

La OCV insiste en la necesidad de potenciar la labor de los veterinarios de explotación como garantes de la prevención, detección temprana y control de estas enfermedades, ya que, ante la menor sospecha, "alertan a los servicios oficiales para que acudan a tomar las muestras y se remitan a los laboratorios de referencia".

En ese sentido, el catedrático de Sanidad Animal en la Universidad de Castilla-La Mancha, finaliza con un mensaje de calma. "La mayor esperanza viene del hecho de que, en las zonas en las que ha circulado con más fuerza la enfermedad, lo más normal es que la inmensa mayoría de los animales tengan ya anticuerpos, de manera que, para los ganaderos de las zonas más afectadas, lo esperable es que el año que viene, tengan menos problemas porque ya la proporción de animales que no hayan tenido contacto con el virus es mínima", afirma.

"Manejando con cuidado a los animales, se puede superar el problema", zanja Gortázar

Otro mensaje que lanza a los ganaderos es "que trabajen muy estrechamente con los veterinarios de explotación. Porque una vaca que presenta los primeros signos y que se trata a tiempo -se le curan lesiones en mucosas orales, se procure que no tenga dificultades para comer y para que el cuadro no se agrave, precisa- y al mismo tiempo se utiliza un antiinflamatorio que permita reducir la fiebre y el riesgo de neumonía que se pueda desarrollar a raíz del virus, si se hace pronto y de forma cuidadosa, lo más normal es que sobreviva. No es algo imposible. Manejando con cuidado a los animales, se puede superar el problema", zanja.