El Sergas afronta un verano duro al no contar con más de 300 médicos que finalizan el MIR

Estos facultativos no terminan este año su residencia en mayo, como es habitual, sino en septiembre | Iniciaron su formación en 2020 con cuatro meses de retraso debido a la pandemia

Un grupo de médicos residentes con su tutor en el Complexo Hospitalario de Santiago. |  // XOÁN ÁLVAREZ

Un grupo de médicos residentes con su tutor en el Complexo Hospitalario de Santiago. | // XOÁN ÁLVAREZ / paula pérez

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Cada año por el mes de mayo llega una nueva hornada de médicos que ya han finalizado su periodo de formación en centros de salud y hospitales y están disponibles para incorporarse a trabajar justo antes de la llegada del verano, un periodo en el que se necesitan más refuerzos debido a las vacaciones de la plantilla y al aumento de la demanda sanitaria en las zonas turísticas. Sin embargo, en 2024 estos facultativos recién formados no llegarán a tiempo para cubrir vacantes en la época estival. La razón es que este año terminan su residencia los MIR que empezaron en 2020, justo en plena pandemia, y esta crisis sanitaria obligó a retrasar el inicio de su formación cuatro meses, de manera que ahora en vez de finalizar en mayo lo harán en septiembre.

El Sergas deberá afrontar así el verano sin la posibilidad de incorporar a los más de 300 médicos que previsiblemente terminarán su formación este año. Si ya normalmente es difícil encontrar facultativos para refuerzos y sustituciones, en verano se complica aún más por las vacaciones del personal sanitario, pero al menos hasta ahora se podía recurrir a estas nuevas promociones de médicos recién formados. Sin embargo, en 2024 esta posibilidad no existe, lo que hace prever unos meses aún más complicados.

Así lo ha advertido la Organización Médica Colegial (OMC) en un informe en el que alertan de esta problemática que va a afectar a la asistencia sanitaria durante el verano. En su opinión, Ministerio de Sanidad y comunidades autónomas deben abordar esta situación con el objetivo de anticiparse y poner soluciones sobre la mesa.

Se trata de un problema derivado de la pandemia de COVID-19, que no solo impactó en la asistencia sanitaria sino también en la parte formativa. La promoción de MIR de 2020 hizo el examen de acceso en la fecha prevista. Sin embargo, la adjudicación de destinos y su incorporación a hospitales y centros de salud se retrasó y en lugar de hacerse en mayo tuvo lugar en septiembre.

El periodo de formación de un MIR depende de la especialidad pero oscila entre los 4 y los 5 años. Esto significa que en 2024 salen ya los primeros médicos de los que iniciaron su residencia en 2020, pero no terminarán su formación hasta septiembre, pasado el verano.

En Galicia, según los datos del Centro de Estudios del Sindicato Médico Andaluz, el pasado año finalizaron el MIR 328 facultativos. Teniendo en cuenta que cada año se incrementan las plazas de residentes, es probable que en 2024 se incremente esta cifra, aunque la Consellería de Sanidade no ha concretado cuántos serán.

En España se calcula que serán 5.700 los médicos que terminen su formación en septiembre y que no estarán disponibles para contrataciones en verano. El acuciante déficit de médicos en toda España hace que los facultativos que terminen su formación estén muy solicitados. De hecho, la Xunta ha articulado distintas medidas para retener a estos MIR cuando finalizan su residencia. Para ello, no solo les promete estabilidad sino que ha mejorado también sus condiciones económicas.

El Sergas ofrece a los residentes que acaban su periodo de formación contratos de hasta tres años de duración. En 2023 un total de 60 MIR se beneficiaron de esta medida.

Desde 2022 la Consellería de Sanidade permite además optar a una plaza fija en centros de salud y hospitales comarcales concurriendo solo a un concurso de méritos y sin necesidad de pasar por una oposición. De esta manera busca captar a las nuevas hornadas de médicos que finalizan el MIR y garantizar, al mismo tiempo, la ocupación de puestos que son de difícil cobertura. El pasado año se ofrecieron por este sistema 400 plazas.

A pesar de ello, no todos los residentes se quedan en el Sergas cuando terminan su formación. Y, en todo caso, estas mejores condiciones laborales no servirán tampoco para solucionar el problema de la falta de médicos en verano, puesto que la promoción de MIR de 2024 no terminará hasta septiembre.

Ante la falta de médicos, la Consellería de Sanidade ha recurrido ya en varias ocasiones a los MIR de cuarto año para pasar consulta en los centros de salud, aunque siempre bajo supervisión de un tutor. Esta medida, sin embargo, causó rechazo entre el colectivo médico.

La Organización Médica Colegial advierte que ante las dificultades que se pueden dar en verano por no disponer de estos nuevos médicos las comunidades o el ministerio pueden optar por cambiar el itinerario formativo y que se obligue a esos MIR a cubrir vacantes o bien que se fuerce a los residentes a finalizar su programa varios meses antes. Los colegios médicos advierten que ambas opciones son “ilegales”.

“Los tiempos de formación han de respetarse ya que suponen uno de los pilares de la formación sanitaria especializada y de la organización coherente y garante de la calidad de los sistemas sanitarios”, señala en su informe la OMC.

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