Muere un adolescente tras ingerir una bebida con ‘cocaína rosa’ que le echaron otros jóvenes en Getafe

El menor, de 14 años, falleció por intoxicación después de ingerir una lata de Red Bull que contenía dos gramos de la droga, mezcla de ketamina, éxtasis y cafeína u La policía investiga los hechos como homicidio

H. G.

Un joven de 14 años falleció por intoxicación en Getafe tras ingerir el pasado viernes una lata de Red Bull que contendría alrededor de dos gramos de la conocida como cocaína rosa o tusi, según informó Europa Press gracias a fuentes del entorno de la víctima, policiales y de Emergencias Comunidad de Madrid. Los padres del fallecido denunciaron los hechos y la Policía Nacional investiga lo sucedido como un delito de homicidio. Los hechos se produjeron el viernes por la noche en la estación de metro de Los Espardales de Getafe, cuando los implicados habrían echado dos gramos de tusi al menor sin que se percatase. Acto seguido huyeron y difundieron un vídeo en redes sociales contando su “hazaña” y mofándose. El joven moría minutos después por intoxicación mortal.

El tusi o cocaína rosa es una mezcla de ketamina, MDMA y cafeína, una droga asociada a la clase alta, a las fiestas de élite y a la prostitución de lujo. En las calles se conoce como tusi y el gramo cuesta alrededor de los 100 euros. “El tusi es un psicoestimulante vendido de manera ilegal en muchos países del mundo, entre ellos España, y cuyo consumo genera alteraciones orgánicas importantes que ponen en riesgo la salud de quien lo toma”, tal y como define el portal web de Psicología y Mente.

Es una droga de tipo feniletilamina, que se vende en forma de polvo similar a la cocaína, pero de color rosa en lugar del blanco. Está formada por una sustancia estimulante cuyos efectos como droga de uso recreativo que parece caracterizarse por inducir alucinaciones visuales y auditivas, además de por elevar el estado de ánimo de una forma similar al modo en el que lo hace el MDMA (llamado también éxtasis). Aunque se la conozca como cocaína rosa, sus efectos son muy diferentes a los de la cocaína, una droga que estimula la alta activación del sistema nervioso, la hipersensibilidad y la tendencia a experimentar euforia o ira.

El origen del tusi es sintético y su uso es mucho menos común que el del crack o la cocaína. A veces se vende mezclándolo con otras drogas como la ketamina (un anestésico de uso veterinario), el MDMA y la cafeína. También puede llevar LSD (ácido) y empieza a detectarse, además, la presencia de heroína en algunas muestras para crear adicción.