Sanidad abre la puerta a que los médicos de más de 55 años no realicen guardias

La ministra, Mónica García, explica que eliminar los turnos de 24 horas exige antes “un estudio detallado por centros y especialidades” y una “reorganización”

Redacción

La ministra de Sanidad, Mónica García, se ha abierto a excluir a los médicos mayores de 55 años de la realización de guardias, una petición que ha sido trasladada por la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM), en el marco de una reunión mantenida ayer en la sede del Ministerio.

En concreto, los responsables de CESM han pedido que, en la modificación del Estatuto Marco, se garantice el derecho a exención de guardias voluntario para mayores de 55 años en todo el Sistema Nacional de Salud.

Por otro lado, se le ha pedido a la ministra información sobre el planteamiento manifestado por la propia ministra sobre su intención de terminar con el sistema de jornadas de 24 horas, postura que con carácter general es compartida por la confederación.

En este punto, García ha admitido que requiere de un “estudio detallado” por centros y especialidades y de “una reorganización importante de los recursos disponibles”, por lo que no es viable su aplicación con carácter inmediato. En lo que respecta a la negociación del Estatuto Marco, CESM ha recordado la necesidad de un estatuto específico para el médico que recoja las especificidades de la profesión o, al menos, “una alternativa que regule la singularidad médica en todos los aspectos, como retribuciones, funciones o jornada laboral”.

Según un comunicado de CESM, por el momento, la postura de Sanidad es “descartar la norma específica”, pese a reconocer la necesidad de recoger esas singularidades de la profesión médica dentro del Estatuto Marco.

También dentro de lo que afecta al Estatuto Marco, y respecto al acceso a las plazas de gestión clínica, jefatura de servicio y sección, García comparte la visión de CESM de que el sistema “no puede estar ligado a la libre designación, sino que debe haber un acceso basado en criterios objetivos, transparentes y sometidos a una evaluación continua del desempeño”.

Además, CESM ha pedido saber cómo se pretende llevar a cabo la anunciada reclasificación profesional, a fin de ver dónde y cómo se encuadra al médico y cómo se modificaría la Ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias (LOPS) y las competencias inherentes al facultativo, con la exigencia de que se reconozca su liderazgo en el proceso asistencial.

Así, se ha hablado de la necesidad de garantizar que las competencias médicas no se transfieren a otras profesiones, lo que se consigue blindándolas tanto en el Estatuto Marco como en la LOPS.