Un pareja y sus dos hijos, un niño de 9 años y una niña de 8, fallecieron ayer como consecuencia de una explosión de gas registrada en una vivienda situada en el centro de Logroño. La abuela paterna, de 81 años, que se encontraba en la vivienda en el momento de la explosión, resultó herida grave, mientras que otras ocho personas residentes en el edificio sufrieron heridas leves.

Los fallecidos son un hombre de nacionalidad argentina de 39 años, una mujer chilena, también de 39 años, y sus dos hijos. Los bomberos encontraron sus cuerpos destrozados en una habitación, por lo que costará identificarlos. En la vivienda en la que ocurrió la explosión también residía la madre del hombre fallecido, que tiene 81 años. La víctima fue rescatada con heridas graves y trasladada al Hospital San Pedro, donde quedó ingresada con quemaduras en el 12% de su cuerpo.

La explosión se originó a las siete de la mañana en el tercer piso del número 25 de la Gran Vía, en pleno centro de la ciudad, y provocó importantes destrozos en la fachada del edificio. Los efectivos de la Policía Local y de los Bomberos del Ayuntamiento de Logroño que se desplazaron al lugar comprobaron que, debido al fuerte olor, presuntamente la explosión fue ocasionada por gas.

Los efectivos anti incendios acudieron al lugar con dos vehículos de altura, entraron a través de la fachada y estuvieron extinguiendo un fuego que se originó, según las primeras investigaciones, en la cocina de una vivienda y se extendió a otros pisos del edificio.

El Servicio Riojano de Salud atendió a otras ocho personas heridas como consecuencia de la explosión. Además de la familiar de los fallecidos, otra mujer fue trasladada al Hospital San Pedro. Se trata de una joven de 34 años que presenta erosiones en cuero cabelludo. Los nueve heridos fueron atendidos en un primer momento por los médicos desplazados del 061 y del SUAP (Servicio de Urgencias de Atención Primaria). Los siete dados de alta a primeras horas presentaban heridas de carácter leve, como erosiones o contusiones y crisis de ansiedad.

Durante toda la mañana los Bomberos estuvieron asegurando el edificio. Las tareas de desescombro se realizaron con mucha lentitud debido al estado en el que quedó el inmueble. El edificio consta de una planta principal más cuatro alturas. Las hipótesis sitúan la explosión en el tercer piso, donde se cayó el forjado al piso de abajo y también se ha visto afectado el forjado que limita con el cuarto piso.

Al menos 132 personas han fallecido en explosiones de gas registradas en domicilios españoles desde el año 2000, las cuatro últimas en la deflagración que se produjo ayer en una vivienda de Logroño. En 16 ocasiones la explosión causó la muerte de tres o más personas, como sucedió en la capital riojana. El siniestro que se cobró más vidas humanas se produjo el 1 de mayo de 2007 en un edificio de cinco plantas de Palencia, en el que murieron nueve personas y más de treinta resultaron heridas de distinta consideración.

El año pasado un escape de gas en una vivienda de cuatro plantas de Huesca provocó tres muertos. En 2008 hubo dos explosiones con fallecidos. Una tuvo lugar el 3 de diciembre en un bloque de pisos de Gavà (Barcelona) y provocó seis muertos y una veintena de heridos. En octubre murieron por la misma causa en Ibiza un matrimonio y su hija de 16 años.