El Juzgado de O Porriño ordenó la busca y captura del empresario Felisindo Silva, cuya familia denunció su desaparición el 9 de febrero. Se le considera pieza clave de una red de tráfico de maquinaria y vehículos de lujo robados en Italia y Galicia, cuyos datos eran falsificados en uno de los talleres que regentaba para su posterior venta en el mercado de segunda mano. La orden se adoptó tras la desarticulación de una banda que comercializaba dichos vehículos.

En la denominada operación Pala, desarrollada por la Guardia Civil, fueron detenidos tres empresarios: el porriñés F.R.S.C., de 28 años e hijo del desaparecido; el italiano S.C., de 41 años, arrestado en uno de los viajes que realizó a España; y el vigués Alberto Carlos Fernández Cabaleiro, de 37 años, viejo conocido de la policía por su vinculación al narcotráfico e investigado por blanqueo de capitales en la operación Halcón, por la que se le embargaron bienes por más de 1,7 millones.

La investigación, que comenzó a finales del año pasado, permitió la localización de una empresa de automoción ubicada en O Porriño, donde se recibían y falsificaban los coches, en su mayoría sustraídos en Italia.