Dos personas han sido detenidas en Baleares y otras 17 están imputadas como presuntas autoras de delitos de falsedad en documento oficial y estafa en el marco de una trama destinada a obtener ilegalmente las ayudas para la compra de coches previstas en el Plan 2000 E.

Entre los imputados hay gerentes, jefes de ventas y vendedores de varios concesionarios de distintas marcas, así como responsables y trabajadores de una empresa suministradora de vehículos de segunda mano.

La operación se inició a finales del año pasado tras descubrirse que algunos concesionarios ofrecían a clientes turismos de segunda mano para que los pusieran a su nombre, lo dieran de baja y se beneficiasen así de los 2.000 euros de ayuda al comprar uno nuevo.

Los implicados se apropiaban de coches que iban a ser destruidos y transferían su documentación a compradores de vehículos nuevos para obtener irregularmente la ayuda estatal.