La Audiencia Provincial de Burgos acaba de ratificar el auto del Juzgado de Menores que acordó el sobreseimiento provisional del triple crimen ocurrido en la capital burgalesa en junio de 2004 y que le costó la vida a tres miembros de una misma familia, un matrimonio y un hijo pequeño. La sala confirma así el archivo de la causa contra el que fue el único imputado, el ourensano Rodrigo Barrio, que era hijo y hermano de las víctimas y que tenía 16 años cuando ocurrieron los hechos.

El auto desestima así el recurso presentado por una parte de la familia de los fallecidos, que seis años después de los crímenes seguían peleando para que se celebrase un juicio.

Los hechos se remontan al 8 de junio de 2004, cuando fueron hallados en su domicilio burgalense los cadáveres de Salvador Crisanto Barrio, de 53 años; su esposa Julia Dos Ramos, de 47 y de su hijo Álvaro, de 12 años.