Treinta y tres detenidos, 18 imputados, archivos con contenidos pedófilos "extremadamente duros" retirados de la Red y la confirmación de que la herramienta informática que posibilitó la localización de estos individuos -el buscador Vicus- es "segura y eficaz". Este es el balance de las dos primeras operaciones contra la pornografía infantil (Telémaco y Amigo) realizadas por la Guardia Civil con este nuevo sistema informático.

La plataforma Vicus nació de la colaboración del Grupo de Tecnologías de la Información (GIT) de la ETS de Ingenieros de Telecomunicaciones de la Universidad de Vigo, el Equipo de Investigación Tecnológica (Edite) de la Guardia Civil de Pontevedra y del Centro Tecnolóxico de Telecomunicacións de Galicia (Gradiant). El primer prototipo se entrega a la Guardia Civil en octubre de 2009 y en mayo de 2010 se hace un peinado que permite localizar a 43.000 usuarios de pornografía infantil de los que 1.185 compartían un mínimo de 15 archivos con material pedófilo y entre ellos 49 estaban conectados en España.

Tras esta primera prueba, en septiembre se puso en marcha la primera operación Telémaco, bajo las órdenes de un Juzgado de Cangas que desembocó en la detención de trece personas, de las que seis están imputadas. En esta operación, en la que intervinieron 65 agentes, la Guardia Civil se incautó de cámaras, objetivos, memorias, abundante material videográfico con niños de muy corta edad y arrestó a dos productores.

Telémaco fue el primer éxito del buscador Vicus, al que siguió en noviembre un segundo operativo en Badajoz, Amigo, que permitió detener a 20 pedófilos (productores y consumidores) de los que 12 están imputados. El éxito de ambos operativos certifican, según explicaban ayer mandos de la Guardia Civil, la eficacia del Vicus cuyo uso, exclusivo de la Guardia Civil, se extenderá por toda España. Este buscador sustituirá al sistema Hispalis.

La aplicación del buscador Vicus -diseñado para localizar pornografía infantil- suscita el interés del FBI, y ya se han producido contactos informales en Madrid. La Guardia Civil de Pontevedra recibe, cada día, una o varias llamadas de ciudadanos alertando de que han recibido en sus ordenadores, o bajado sin querer, material con escenas de pornografía infantil no deseado.