La Audiencia Nacional acoge esta semana el inicio de la vista contra la red presuntamente liderada por el hijastro de Laureano Oubiña David Pérez Lago implicada en el desembarco de dos toneladas de cocaína en Corme. Aunque la Fiscalía realizó un escrito inicial en el que pide condenas de más de 250 años de prisión para los 14 acusados, estas penas no serán las que, al final, se imponga a los procesados.

En primer lugar, porque la acusación debe modificar sí o sí a la baja sus peticiones conforme a la reciente reforma del Código Penal que suaviza los castigos a narcos. Y, en segundo lugar, porque el proceso llega a juicio con el telón de fondo de los acuerdos previos a los que se ha intentado llegar con la Fiscalía para rebajar las penas: de 20 a 9 años de cárcel en el caso de Pérez Lago, y de 18 a 7, en el del resto de implicados.

Habrá que esperar al jueves, cuando arranca el juicio, para ver si finalmente hay cabida a la conformidad. Aunque en las negociaciones la mayoría de imputados habría aceptado el acuerdo, no todos están conformes, entre ellos la abogada arousana Tania Varela, también acusada.