Un total de 44 personas murieron ayer al estrellarse un birreactor de pasajeros Tu-134 en el noroeste de Rusia, accidente cuyas causas se desconocen, y al que sobrevivieron ocho de los ocupantes de la nave, todos ellos heridos de gravedad. El aparato, perteneciente a la compañía rusa Rusair, se estrelló minutos después de la medianoche en una carretera apenas a dos kilómetros de su punto de destino, el aeropuerto de Petrozavodsk, capital de la república rusa de Karelia. El Tu-134 había despegado una hora y media antes desde Moscú. / Redacción