La Guardia Civil detuvo, gracias a su perfil genético, al supuesto autor de siete delitos de agresión sexual, robo con violencia y detención ilegal que sufrieron varias prostitutas de Valencia hace cuatro años.

El autor de los hechos actuaba en horas nocturnas, y escogía a sus víctimas de manera anticipada. Tras convenir con las prostitutas sus servicios, las trasladaba en su vehículo hasta las inmediaciones de un cementerio, donde las inmovilizaba y agredía sexualmente.

Después de perpetrar las agresiones, transportaba a sus víctimas a localidades próximas a Valencia, donde eran abandonadas y en algunos casos les robaba sus pertenencias de forma violenta.

El detenido, que cumplía condena por otro delito en el Centro Penitenciario de Picassent, aprovechaba los permisos penitenciarios para cometer los delitos.

La investigación de esta operación, denominada Oeste, comenzó en 2007.