La Audiencia Provincial de Lugo ha condenado a José Carnero, O Chucán, a 10 años de prisión por el asesinato de Pilar Palacios, una prostituta que fue hallada sin vida en su casa en el municipio de Sober (Lugo) en 2007. El hombre confesó la autoría del crimen a los medios de comunicación tras ser absuelto en un primer juicio, y volvió a ser juzgado. El tribunal le condena por un delito de asesinato, como dictaminó el jurado popular la semana pasada, y fija que en concepto de responsabailidad civil deberá indemnizar con 150.000 euros al hijo de la víctima y 13.634 euros -10.000 por daño moral y 3.634 por el sepelio- a la madre de la mujer fallecida.

La sentencia descarta la posibilidad de que O Chucán sea recluido en un centro psiquiátrico, como propuso su abogado defensor. El jurado no reconoce que Carnero tenga ninguna "alteración psíquica", sino una "alteración de la percepción", además de un coeficiente intelectual bajo.

Contra la sentencia, que además determina la inhabilitación absoluta de O Chucán durante el tiempo de la condena y le requiere abonar las costas procesales, cabe recurso de apelación ante el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) en un plazo de diez días desde la notificación.

La sentencia considera probado que el 14 de septiembre de 2007 Carnero se dirigió en su vehículo desde su residencia, en Arxemil (Sober), al club Tosca, ubicado en Ourense, en donde trabajaba la mujer asesinada. Ella le acompañó a su domicilio para mantener relaciones sexuales.

"En día y hora no determinada, pero situada entre el sábado 15 y el domingo 16, José Carnero y Pilar -nombre de la víctima- se dirigieron a una dependencia de la vivienda de aquel en la cual este guardaba el aguardiente, así como aperos de labranza y diversos útiles, agrediendo en este lugar a Pilar, con uno o varios objetos contundentes, tales como un mazo, un hacha o un hierro alargado", continúa el relato.

Además, la sentencia da por probado que la agresión se produjo "con intención de matarla" y señala que el cuerpo fue encontrado el martes día 18 de septiembre de 2007 en esa misma dependencia de la vivienda de Carnero. El hallazgo lo hicieron el cuñado y un vecino del condenado, que lo buscaban para comunicarle la muerte de su padre. La sentencia considera, de conformidad con el veredicto del jurado, que O Chucán "desplegó una violencia extrema, abordando a Pilar de forma sorpresiva, de tal modo que impidió su defensa". También admite que "al tiempo de la comisión de los hechos y en atención a su personalidad, tenía alterada gravemente su percepción de la realidad".