La pesadilla de la familia del joven natural de Portonovo Hugo Leiro, encerrado en una prisión de la República Dominicana tras haber sido detenido al detectar un alijo de cocaína en su maleta en el aeropuerto de Punta Cana en 2011, ya tiene fecha de caducidad: los seis años de cárcel a los que fue condenado hace unas semanas por un tribunal del país caribeño.

El padre del joven, José Luis Leiro Buitre, reconoce que, tras casi dos años y medio "de pesadilla", parece que comienza "a ver el final del túnel". "Confiamos en que pueda ser trasladado a España en un plazo de seis meses", dice.

Buitre reconoce que mantiene contacto habitual con su hijo y asegura que se encuentra "en perfecto estado" detenido en la prisión de San Pedro, una de las que se encuentran en buenas condiciones en el país. Según el padre del recluso, allí mata el tiempo encerrado en su celda pero también "trabajando como jardinero y completando su formación intelectual". "Además están en contacto con otros presos españoles que se encuentran en esa prisión", añade.

Leiro reconoce que desde que su hijo fue detenido hace dos años "todo fueron problemas", pero que ahora vuelve a tener "esperanza". "Pasamos un verdadero calvario, ya que hubo gente que trató de aprovecharse de la situación en la que nos encontrábamos. Nos han llegado a timar muchos euros con la promesa de que regresaría a casa, promesas que eran mentiras, pero eso ya es pasado y esperamos tener a Hugo en breve con nosotros", confiesa el padre.

El joven de Portonovo fue detenido en el mes de enero del año 2011 en el aeropuerto de Punta Cana con cerca de 30 kilogramos de cocaína escondidos en el interior de su maleta, una droga que él siempre dijo que no era suya. Leiro viajaba en compañía de otras dos jóvenes vilagarcianas, que también fueron detenidas aunque ya se encuentran en España.