Un juez de Sevilla ha archivado la causa contra Francisco Javier Delgado, hermano del asesino de Marta del Castillo, Miguel Carcaño. Este había acusado a su hermano de matar a la joven a culatazos de revólver. El juez ve esta acusación como "ilógica" y sostiene que la policía "se extralimitó" al investigar hechos ya juzgados en sentencia firme. En un auto, el juez de instrucción número 4 estima que la última versión de Carcaño es "inverosímil, fantasiosa, inconsistente, ilógica e increíble".

Ante la falta de credibilidad "notoria y grosera" de Carcaño y la existencia de una sentencia firme del Supremo que absolvió a su hermano de ayudarle a ocultar el cadáver, el juez afirma que la policía incurrió en una "clara extralimitación" al volver a tomar declaración a testigos sobre los movimientos de Delgado, sus llamadas telefónicas o el tiempo de desplazamiento a la calle Tharsis, donde pasó la noche con su exesposa. "Desde el punto de vista subjetivo, la credibilidad de Carcaño es nula y no se acierta a comprender cómo la policía le concede tal beneficio", dice el juez. El instructor añade que "quien desde una conducta de extrema gravedad ha sido capaz de mentir tantas veces" sobre el paradero del cuerpo de Marta del Castillo "no puede recibir hoy de manera tan gratuita tamaño reconocimiento".

El juez Francisco de Asís Molina afirma que la Policía Judicial ha "desenfocado el objeto de la pieza separada" que mantiene abierta para localizar el cuerpo de la adolescente. Con ello ha vulnerado el principio de "cosa juzgada" y ha hecho "valoraciones sobre la credibilidad de los testimonios que solo competen a la Justicia".