El cadáver de un hombre de 57 años, ensangrentado y con signos de violencia, fue hallado ayer en el interior de un vehículo en una finca situada junto a la carretera que une los municipios mallorquines de Bunyola y Santa María. Dos personas que estaban dando un paseo por la zona encontraron a la víctima sobre las 09.00 horas y alertaron a la Guardia Civil.