Un golpe millonario con un botín de más de 530.000 euros en tabaco y un asalto espectacular a cargo de una banda especializada en plena N-550, a la altura del municipio pontevedrés de Vilaboa, con toda la mercancía recuperada dos horas después. Cuatro encapuchados interceptaron y robaron ayer un camión de la distribuidora Logista y tras apoderarse de su carga lo dejaron abandonado en Arcade.

El camión acababa de salir de la nave que la distribuidora Logista tiene en Vilaboa y comenzaba su ruta de reparto a los estancos cuando, a las 09.40 horas, dos vehículos lo interceptaron cruzándose y cortándole el paso a la altura del kilómetro 130,500. Del interior de los coches salieron cuatro personas que cubrían sus rostros con pasamontañas. No portaban armas, pero de forma violenta obligaron a bajar al chófer y a su acompañante dejándolos tirados en la carretera.

Inmediatamente subieron a la cabina y se llevaron el vehículo con el tabaco, seguidos por los dos turismos que utilizaron para el robo y que también habían sido sustraídos. Apenas media hora después la Guardia Civil localizaba el camión vacío en la zona de Arcade, en el municipio de Soutomaior. Los asaltantes se llevaron de su interior un total de 265 cajas de tabaco -147.750 cajetillas-, valoradas en 530.000 euros.

Uno de los vehículos utilizados para interceptar el camión fue identificado. Se trataba de un Seat León de color rojo que había sido robado la noche anterior, en Vigo es decir apenas unas horas antes. Este dato hace sospechar que la banda tiene relación con la que el pasado mes de junio perpetró un robo similar en Leganés. Entonces los encapuchados esgrimieron armas de fuego y cortaron el paso al furgón utilizando dos Seat León robados.

La Guardia Civil estableció un amplio dispositivo de cierre y localización. A raíz de las investigaciones de la Policía Judicial de Pontevedra, los agentes localizaron y recuperaron la totalidad del tabaco sustraído antes de que los ladrones procedieran a su traslado. Estaba en una nave abandonada, también en Arcade. La investigación prosigue para localizar a los autores, a los que se considera "perfectamente conocedores del entorno donde ocurrieron los hechos". Todo apunta que se trata de un grupo profesional que durante un tiempo vigiló la entrada y salida de los camiones en la nave para elegir su objetivo, y que los cuatro encapuchados contaban con personal de apoyo.