Especial preocupación muestra la Audiencia de A Coruña ante el riesgo de fuga de Rosario Porto. A tenor de los datos obrantes en la causa, la Sección Sexta ve más "lógico" que la imputación sea de asesinato (más de 15 años de prisión) y no de homicidio (más de 10 años), además de la posible entrada en juego de otros agravantes, como la de parentesco que suscita el fiscal o incluso alevosía. El tribunal teme que ante la elevada pena a la que podría enfrentarse, la madre de Asunta se sustraiga de la acción de la Justicia. Destaca que el arraigo de Rosario Porto en Santiago es "incuestionable", pero también lo es que "ha abandonado su anterior ocupación de abogada en ejercicio y que las actividades últimas la llevaron a viajar en varias ocasiones a Marruecos, su pérdida de vinculación familiar tras el fallecimiento de su hija y el divorcio de su esposo, así como los padecimientos físicos y psíquicos que ha sufrido recientemente, por lo que no es en absoluto descartable ese riesgo de fuga". El auto recoge la tesis del fiscal de que Porto dispone de medios suficientes para huir y de que en su casa se encontró una importante cantidad de dinero en efectivo.