Un espectacular accidente que acabó con un coche destrozado pero sin que milagrosamente hubiese que lamentar daños personales graves. Tres jóvenes salvaron su vida la pasada madrugada en Vigo después de que el conductor perdiese el control del vehículo en una curva: el turismo, un Peugeot 307, se salió de la vía y se precipitó desde una altura de más de cuatro metros hasta el patio de una vivienda, donde acabó empotrándose contra la fachada. El ruido despertó a los dos matrimonios y a los tres niños de la casa. "Estábamos durmiendo y escuchamos un estruendo, que fue enorme, como una bomba, como una explosión...; y empezamos a escuchar quejidos y gritos pidiendo auxilio", describían horas después aún impactados. Todo apunta a que la velocidad inadecuada es una de las causas del siniestro.

Sucedió a las cinco de la madrugada en Bembrive, en la carretera de las Plantas, un vial por el que se accede al CUVI. El turismo en el que viajaban los tres jóvenes circulaba en sentido descendente cuando, a la altura de una peligrosa curva donde ya se han registrado otros aparatosos accidentes, el conductor perdió el control, atravesó el carril ascendente y se salió de la vía. El coche se llevó por delante el vallado de protección de la carretera y el de la propia vivienda y se precipitó hasta el patio de la casa, impactando con su parte delantera contra la fachada, donde está la ventana del salón. El vehículo quedó volcado.

El estruendo despertó a los residentes, que salieron a auxiliar a los heridos. Además del matrimonio formado por José Leirós y Margarita Figueroa, que dormían a escasos metros del punto en el que se empotró el coche, en la casa viven su hija y el marido de ésta, así como los tres niños de esta última pareja. Con ayuda, los tres ocupantes del vehículo, dos chicos y una chica, que resultaron heridos, pudieron salir del coche, por lo que no fue necesaria la intervención de los bomberos, que se trasladaron por si era necesario excarcelarlos.

Los jóvenes regresaban al parecer de una cafetería ubicada en el parque forestal de Bembrive. Detrás de ellos, en otro coche, viajaba una pareja de amigos que cuando ocurrió el siniestro no dudó en saltar desde la carretera hasta el patio para socorrerles. Los heridos fueron trasladados a centros sanitarios para recibir asistencia por las heridas que presentaban. Al menos el conductor ya había recibido el alta horas después.

Debido a la violencia del impacto, la fachada de la vivienda, que acababa de ser objeto de una reforma, sufrió daños. Una pieza del coche quedó incrustada en la pared. Además, en la caída el turismo se llevó por delante una farola, por lo que la casa se quedó sin luz. Además de 061 y bomberos, al lugar acudió Policía Local y Guardia Civil, que se hizo cargo de la investigación. Todo apunta a que el conductor se habría salido de la vía debido a una velocidad excesiva. Los agentes le hicieron la prueba de alcoholemia, pero no trascendió el resultado de la misma.