El secreto de sumario les impide conocer las pruebas e indicios que hay contra ellos en la causa por el asesinato de su hija, pero la abogada Rosario Porto y su exmarido, el periodista Alfonso Basterra, apuestan por proclamar su inocencia en los medios de comunicación desde la prisión de Teixeiro, donde ambos están internos. Afirman ser inocentes y no se exculpan el uno al otro, pero tampoco se acusan directamente. Así, el ha concedido una entrevista a un antiguo compañero de El Correo Gallego, periódico en el que trabajó durante unos años, y Rosario contraataca mediante una carta manuscrita remitida a un programa de Telecinco que ya anuncia la exclusiva para su edición del sábado por la noche.

Basterra que, según su propio relato, compró el Orfidal que tomaba su mujer en una farmacia cerca de su casa pero aunque la niña, según el juez y a tenor de los datos toxicológicos, fue forzada a una ingesta masiva de dicho medicamento el día de su muerte, niega haberle dado dosis alguna en la comida a Asunta "que salió de mi casa andando con su madre". Apostilla que "confío en la inocencia de Rosario" y en alusión a su expareja añade que "deseo con todas mis fuerzas que pueda salir bien de este embrollo, rezo para que sea así".

La entrevista concedida en la prisión de Teixeiro por Basterra a El Correo Gallego, tuvo lugar el pasado domingo. Dos días después, el 29 de octubre, llegaba a Telecinco la carta manuscrita de Charo, 51 líneas escritas en un folio a dos caras con bolígrafo azul en las que proclama su inocencia y cuyo contenido no ha sido desvelado. La misiva fue enviada al programa Abre los ojos... y mira y en el remite Porto refleja el lugar desde el que la envía: el centro penitenciario de Teixeiro, en el que está interna desde el día 27 de septiembre imputada por presunto delito de asesinato al igual que su exmarido.