El conductor del coche siniestrado en la madrugada del domingo en Ordes (A Coruña), en el que murieron dos de los cinco jóvenes que viajaban en él, será imputado por sendos homicidios imprudentes, según ha informado a Europa Press la Guardia Civil. Estas mismas fuentes han confirmado que el joven, de 19 años, dio positivo en la prueba de la alcoholemia que se le realizó tras el accidente.

Mientras, el único herido que continúa ingresado permanece estable en la unidad de críticos del Complejo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS). Su pronóstico es reservado, aunque permanece estable, de acuerdo con el parte médico facilitado por el centro hospitalario. Los otros dos jóvenes fueron dados de alta el domingo.

Los heridos en este accidente fueron tres varones, de entre 18 y 19 años, de iniciales P.B.S; I.I.S; y P.B.S. En el accidente fallecieron, además, un menor, de 16 años, y un joven de 19 años, ambos vecinos del municipio de Oza-Cesuras.

El siniestro, que tuvo lugar alrededor de las 5.00 horas del domingo, se produjo tras una salida de vía que llevó al vehículo a impactar contra un árbol, de forma que los dos fallecidos murieron en el lugar sin que los sanitarios pudiesen hacer nada por salvar sus vidas.

Prueba de alcholemía

Fuentes de la Guardia Civil han confirmado que el conductor del vehículo se enfrentará ahora a una imputación por dos homicidios imprudentes, después de que diese positivo en la prueba de alcoholemia. A ello, se uniría el exceso de velocidad que se apunta como causa del siniestro.

Desde el municipio de Oza-Cesuras, donde residían los jóvenes, no han confirmado este extremo, aunque, fuentes consultadas por Europa Press, han manifestado que se comentaba que no circulaban "despacio".