La denuncia de una mujer nigeriana, obligada a prostituirse en Vigo, llevó a la Policía Nacional a una auténtica casa de los horrores en la localidad de Valmojado en Toledo. Allí liberaron a dos niños de apenas 3 años que una mafia nigeriana retenía como garantía de pago y para doblegar la voluntad de sus madres obligadas a prostituirse y abonar elevadas sumas de dinero a modo de "deuda". Con los niños en su poder evitaban que las afectadas denunciaran o escaparan de la organización.
La operación se desarrolló el pasado 29 de julio pero no trascendió hasta ayer para localizar a los responsables de la trama en Marruecos y distintos países europeos donde eran vendidas las mujeres. El matrimonio nigeriano que actuaba como carcelero de los menores ha sido detenido junto a una tercera persona de la red. Cuando los agentes irrumpieron en la vivienda de Toledo, los dos niños presentaban un evidente grado de desnutrición y nulo aseo personal.
