El director médico que atendió a Rosario Porto cuando voluntariamente ingresó en 2009 en el Sanatorio La Robleda, el doctor Narciso Carrero, asegura que la madre de Asunta Basterra "no debería haber sido dada de alta" entonces porque consideraba que "no estaba bien". "Era huidiza, extraña", según ha sostenido, pero "no decía nada incoherente".

Así lo ha manifestado, en declaraciones a Europa Press, el doctor Carrero, que ha definido a Porto "como una interrogante" y ha subrayado que, tras pasar "unos días" --menos de una semana-- en el centro pidió el alta voluntaria, y él recomendó que "no debería ser dada de alta" porque "había algo".

Al respecto, ha comentado que "había algo, de la cabeza, no de depresión". "Siempre estaba huidiza y no quería entrar al trapo", ha recordado el entonces director médico de La Robleda, centro en el que se tratan trastornos psicológicos y enfermedades psiquiátricas. "Era rarecha", ha apostillado.

Preguntado sobre si en alguna ocasión habló de su hija adoptiva Asunta, el doctor Carrero ha comentado que "nunca la mencionó". "Un poco al padre y al marido", ha añadido.

Porto había acudido de forma voluntaria al centro "por un episodio que pasó en casa y el padre la convenció". No obstante, el entonces director médico de La Robleda ha señalado a Europa Press que "había un poco de oscurantismo" sobre el motivo de su ingreso. "No le daba importancia a lo que había pasado", ha apostillado sobre la actitud de ella.

"Nunca supe lo que era"

En este sentido, ha comentado que cuando Porto se fue de la unidad terapéutica "no estaba bien". "Cuando la vi no estaba bien, no deprimida, tenía mal contacto con el mundo externo", pero "nunca decía nada incoherente".

"Estaba como a la defensiva", ha relatado. Preguntado sobre si le ha sorprendido la imputación por asesinato de Porto, ha respondido que "sí". "Cuando esto pasó pensé que no era la misma (persona que había atendido). Si me llegan a decir que agrede a alguien lo encajaría más", ha admitido.

Asimismo, ha recordado que Porto "tenía actitud pasiva". "A veces todo puede estar bien pero ves que pasa algo aquí", ha sostenido el doctor Carrero, que ha reconocido que cuando dejó el centro escribió la anotación: "No debería ser dada de alta porque aquí me huelo a castaña". "Nunca supe lo que era", ha concluido.