La Guardia Civil ha hallado en las inmediaciones del aeropuerto de Santiago el cadáver de la mujer de 37 años desaparecida el pasado domingo en Vilaboa, cuyo marido ingresó en la prisión de Monterroso (Lugo) imputado por un delito de homicidio, informaron fuentes judiciales.

La Guardia Civil trataba de dar con el paradero del cadáver de la mujer desde la tarde de este lunes siguiendo las indicaciones que su marido dio en sede judicial.

En un primer momento la búsqueda se centró en la zona de Teixeiro, y hoy por la mañana se extendió por diferentes puntos de la provincia de A Coruña, hasta que fue hallado el cuerpo sin vida en una pista en el monte de Gonzar, en el término municipal de O Pino.

En el juzgado de Lugo que instruye la causa y que ha decretado el secreto de las diligencias consta una denuncia previa en relación a la pareja, pero entonces la víctima negó los malos tratos, por lo que no existía ninguna medida en relación al ahora presunto homicida, precisan las fuentes judiciales.

La Delegación del Gobierno en Galicia informó ayer de que a través de terceras personas las fuerzas de seguridad tenían conocimiento de que el año pasado la mujer, natural de Poio (Pontevedra), pudo sufrir un episodio de malos tratos en el ámbito familiar.

La denuncia de su desaparición fue presentada por un familiar el pasado domingo en la Comandancia de la Guardia Civil de Pontevedra.

Mientras se buscaba el cadáver, la Guardia Civil ha practicado a lo largo de la mañana nuevos registros en el domicilio del matrimonio, en la calle Orquídea de Lugo.

En el caso de que se confirmen las circunstancias apuntadas por la investigación se trataría del segundo fallecimiento por violencia de género en Galicia en lo que va de año y el décimo en España.

La Delegación del Gobierno en Galicia manifiesta en un comunicado su "más enérgica repulsa" hacia quienes ejercen "cualquier tipo de violencia, especialmente la que se ejerce contra las mujeres".

Asimismo, reitera la importancia de que las mujeres víctimas de malos tratos denuncien bien personalmente ante las fuerzas y cuerpos de seguridad o a través de teléfono 016, que es gratuito y garantiza la confidencialidad de la llamada, ya que no queda registrado en la factura telefónica.