El ciudadano rumano detenido por la Guardia Civil tras dejar encerrado en su coche a su hijo de tres años mientras él se encontraba en un club de alterne de Vilaboa (Pontevedra), quedó en libertad tras comparecer en un juzgado de Cangas. Este varón, de 29 años y que reside en Mos, está imputado por un presunto delito de abandono temporal de menor. Como medida cautelar, tendrá que comparecer cada mes ante el juzgado.
El niño fue puesto bajo la custodia de su madre, aunque el juzgado también dio orden de poner el caso en conocimiento del Ayuntamiento en el que resida la familia del pequeño, con el objeto de que los servicios sociales municipales realicen un seguimiento de su evolución y para certificar que los cuidados que recibe son correctos.
El padre fue detenido en la madrugada del miércoles cuando una patrulla de la Guardia Civil que realizaba labores de prevención en las inmediaciones del Havana Club en la localidad de Vilaboa, se acercó a un coche del que procedían los lloros de un niño. En el interior vieron al pequeño, que se encontraba solo, llorando y con aspecto de estar desorientado.
