El Juzgado de Instrucción Número 2 de Santiago ha notificado este miércoles un auto en el que se acuerda el archivo definitivo de la causa contra el imputado cuyo perfil genético fue encontrado en la camiseta de la niña Asunta Basterra Porto, R.C.J., por lo que permanecen imputados en la causa únicamente los padres de la menor, Rosario Porto y Alfonso Basterra.

Según informa el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), el magistrado que instruye la causa entiende que hay "indicios suficientes" para concluir que "se produjo una contaminación en el laboratorio de ADN del departamento de Criminalística de la Guardia Civil".

Además, indica el TSXG que en el auto se señala que "ha quedado acreditado" que los dos trozos de prenda en los que se halló semen fueron seleccionados con las mismas tijeras que un preservativo utilizado por el hasta ahora imputado, que estaba en el laboratorio por otra investigación.

Apunta también que dichos trozos no son contiguos y "el propio laboratorio en su informe resalta que nos es normal que en una primera serie de recortes no aparezca el semen". Destaca además el juez instructor, José Antonio Vázquez Taín, que las dos muestras en las que apareció el perfil genético del tercer imputado en la causa pertenecen a dos manchas distintas, y que los recortes efectuados a su alrededor no dieron positivo.

El juez expone en su argumentación que el informe del laboratorio de criminalística "afirma que uno de los recortes contiene ADN de un guardia civil" y añade que "no correspondería con la lógica imputar al mismo el fallecimiento de Asunta, como no se ha hecho". Con todo, incide en destacar que el Laboratorio del departamento de Criminalística del Instituto Armado "es ejemplar" y cuenta con un "reconocimiento merecido" por su trabajo.

Estaba en Madrid

Añade el magistrado para explicar el archivo de la causa contra el tercer imputado que el posicionamiento de los teléfonos indican que tanto R.C.J. como su ahora esposa "estaban en Madrid" el día del crimen.

También consta que él y su hermana recogieron un traje en un centro comercial y que cenó con otras personas de su entorno en Madrid el día de la muerte de Asunta.

Otro argumento esgrimido por el juez es que atendiendo al índice de intoxicación de la víctima y tiempo de ingesta de la sustancia, es un hecho indiscutible que el hasta ahora imputado no participó en la intoxicación de la víctima con loracepán, puesto que estaba con sus padres "cuando se produjo la ingesta forzada".

"No fue un acto aislado"

En este sentido, en su argumentación el juez sostiene que "el asesinato de Asunta no fue un acto aislado, sino una sucesión de hechos premeditados y previamente preparados para una culminación final". Así, añade que "lo que existe es una preparación previa, consistente en la adquisición de la sustancia tóxica que se va a suministrar a la menor, loracepán, la cual está directamente conectada con el presunto asesinato como sustancia que anuló la voluntad" de la menor.

El juez concluye en su auto que hay "elementos objetivos, algunos imposibles de manipular por el imputado y su entorno", como son "los posicionamientos telefónicos, pago telemático, comanda de una cena, fecha de facebook, y otros que examinados no han sido manipulados, como son los metadatos de cinco fotografías, y diferentes testificales que indican que Ramiro C.J. estaba en Madrid", confirmando, así según el instructor, "que la sospecha de contaminación es cierta".

"Partiendo de dichos datos, mantener la imputación del investigado es una palmaria injusticia que afecta a sus derechos y que ha de ser corregida de inmediato", concluye el magistrado.