Ocho niños, de entre 18 meses y 15 años, fueron encontrados ayer muertos a puñaladas en una casa de la localidad australiana de Cairns, en el noreste del país, informó la policía. Una mujer, de 34 años, fue hallada con heridas de arma blanca en el pecho en la vivienda, a la que la policía acudió tras una llamada de alerta, según un comunicado policial del estado de Queensland.

La mujer, de nacionalidad australiana y de la que la policía cree que era madre de siete de los niños, se encuentra en estado estable en el Hospital de Cairns y colabora con las autoridades en esclarecer el suceso. La cadena de televisión ABC informó de que en la casa vivían una sobrina y un sobrino suyos y añadió que algunos menores eran hijos de su hermana.