Penas que suman 121 años de presión y multas por más de 2.133 millones de euros. Esta es la condena impuesta por la Sección Tercera de la Audiencia Nacional a la organización gallego-valenciana liderada por Rafael Núñez Cencerrado, el Valenciano, por introducir en el año 2009 un alijo de 800 kilos de cocaína por el Puerto de Marín, más de 500 por el de Valencia y otra partida que fue intervenida en Madrid hasta un total de 1.500 kilos de droga.

La sentencia, notificada ayer, reduce sensiblemente los 881 años de prisión que solicitaba la Fiscalía Antidroga y condena solo a 22 de los 43 procesados. En total se les atribuyen tres alijos por un total de 1.500 kilos de cocaína, así como dos laboratorios de cocaína que fueron desmantelados en Madrid.

La pena más alta se impone a Cencerrado, 16 años de cárcel por un delito continuado contra la salud pública, y 2 años más por tenencia ilegal de armas. A su lugarteniente, el colombiano Fabián Gilberto Pears Gutiérrez, se le imponen 16 años también por su condición de jefe. La multa para cada uno de ellos es de 150 millones de euros. Muy lejos de los 56 años que la Fiscalía solicitaba para cada uno de ellos. El tribunal reduce la condena, entre otras cosas, porque no considera probado que ambos tuvieran relación con los dos laboratorios desarticulados.

Las penas para la rama gallega de la red también se reducen y pasan de los 12 años solicitados inicialmente por la acusación pública, a 7 años de prisión y multa de 141 millones de euros al no considerarse miembros de organización. Entre los condenados se encuentran el abogado vigués César P.M., el empresario coruñés Roberto Morales (que prestó su empresa como tapadera para la importación de las gambas congeladas entre las que se ocultaba la cocaína que entró por Marín), José Daniel O.A. y el guardia civil Francisco Estévez. En el caso del colombiano Francisco Javier Jaramillo, afincado en O Grove, la condena se eleva a 9 años y un día por la agravante de pertenencia a organización.

Un caso especial es del arousano Miguel N.G. No participó en el alijo que entró en un contenedor por Marín, sino que se le atribuyen los 10 kilos de cocaína que se interceptaron en Adanero cuando eran transportados de Madrid a Arousa. El tribunal le condena a 6 años de prisión y sostiene que Cencerrado y Fabián Gilberto acordaron con el arousano venderle 70 kilos de cocaína en partidas de 10 kilos a la semana. El presidente de al sala, Guillermo Ruiz Polanco, emite un voto particular discrepante sobre esta condena. El juez considera que la única llamada telefónica que se le atribuye no está probada: "La Sala no puede conocer con quien habla Jaramillo, toda vez que no se consigna el número telefónico llamante" y tilda de "absolutamente injusta".