Penas que suman 16 años de prisión. Esta es la condena impuesta por el juez de Penal 2 de Ourense a la banda coruñesa que alquiló un coche para atracar una entidad bancaria en la localidad ourensana de A Manchica. El magistrado no hace distinciones entre los dos autores materiales del atraco, que irrumpieron en la oficina encapuchados y armados, y los dos compañeros que actuaron como vigilantes en el exterior, uno de ellos incluso a ocho kilómetros del lugar del atraco. "Todos y cada uno conocían la función de los otros ", sostiene la sentencia, y precisamente la participación activa de los cuatro fue determinante en la ejecución de un plan que se desarrolló según lo previsto y del que resultó un botín de 48.050 euros.
Entre los cuatro suman 16 años de prisión con una clara diferencia entre los 2 años que cumplirá uno de los autores materiales del asalto, que colaboró con la Guardia Civil confesando los hechos y delatando al resto de sus compañeros, y los 6 años de cárcel que el juez impone a uno de los que actuó como vigilante al que le aplica la agravante de reincidencia.
Los cuatro coruñeses se reunieron a las 06.30 horas del 17 de diciembre de 2013 en una estación de servicio de Ordes y desde allí se dirigieron a Ourense en un vehículo de alquiler. Minutos después de la apertura de la sucursal, Carlos G.C. irrumpía en la oficina con una pistola de fogueo con la que intimidó a los empleados para que abriesen la caja fuerte. Mientras, Higinio M.M. controlaba la puerta con un arma corta de bolas a gas con la que encañonó a dos clientes. Los otros dos atracadores vigilaban las carreteras por si llegaba la Guardia Civil, según al sentencia. Así, Ricardo R. se encontraba en un punto a 8 kilómetros en dirección a Ourense, y Juan Antonio G.A., entre Celanova y A Manchica.
Los cuatro vecinos de A Coruña se reunieron tras el atraco en una pista de servicio de la A-52 en Toén, donde se cambiaron de ropa. Dos días después, fueron detenidos. Carlos G.C. se desmoronó ante la Guardia Civil y confesó.
Cambio de placas en el coche
Los cuatro coruñeses han sido condenados, además de por el robo con violencia, por un delito de falsificación en documento oficial por cambiar las placas de matrícula en el vehículo de alquiler. Al llegar a Toén cambiaron la matrícula del Seat Córdoba alquilado por la de un Ford Escort. Una vez que huyeron del lugar del atraco realizaron la operación inversa. El juez destaca que tanto Carlos G.C. como Higinio M.M. reconocieron haber participado en el robo, el primero ofreciendo una descripción "detallada" de cómo se planeó y se desarrolló, quiénes intervinieron, qué papel asumió cada uno, cómo huyeron y cómo se repartieron el botín; si bien el segundo solo admitió su participación sin delatar a los otros dos.
