Los 56 ocupantes del tren de pasajeros de la línea entre Sevilla y Almería que descarriló la noche del viernes resultaron ilesos. El tren se salió de la vía a la altura del barrio almeriense de El Puche a las 21.29 horas del viernes, aunque no volcó. El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias, (Adif) investiga si el accidente ha sido motivado por el barro que permanecía en las vías tras una tromba de agua caída la tarde del viernes. La tromba provocó daños en la vía o en las inmediaciones, por lo que hubo que hacer reparaciones y finalmente se restableció ayer el tráfico ferroviario a las 19.40 horas.