Un hombre de unos 50 años murió en el parque nacional de Brecon Beacons, en Gales, tras alcanzar un rayo el palo para selfies que sostenía mientras se hacía un autorretrato. Al parecer, el artilugio, de metal, acabó fulminando al senderista durante una fuerte tormenta. La víctima podría ser un asesor del duque de Edimburgo. El número de accidentes con estos palos ha obligado a que varios lugares emblemáticos hayan prohibido su uso. Entre ellos todos los parques Disney, la Ópera de Sidney o la Torre Eiffel.