Al menos 43 personas han muerto después de que un autobús de la Gendarmería Nacional de Argentina se precipitara por un barranco en la provincia de Salta, en el norte del país, según un nuevo balance confirmado por las autoridades.

El autobús se salió de la vía en un puente y cayó a un arroyo seco, a unos 25 metros de profundidad, a unos 50 kilómetros de la localidad de Rosarito de la Frontera. El vehículo realizaba el trayecto entre Santiago del Estero y Jujuy.

A bordo viajaban entre 50 y 60 personas, según los medios locales. El gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, cifró en 43 muertos y ocho heridos el balance provisional de víctimas tras el "desastre", según declaraciones recogidas por la agencia oficial Télam. Se trata de la peor tragedia sufrida en la historia de la Gendarmería.

En un primer momento se atribuyó como posible causa del siniestro que el conductor del autobús perdió el control del vehículo por el mal estado de la carretera, algo a lo que ha apuntado el propio intendente de Rosario de la Frontera, Gustavo Solís, que dijo que los vecinos suelen evitar este camino. "La ruta está totalmente deteriorada. Los que conocemos la zona tratamos de no andar de noche", relató Solís, que no obstante pidió cautela a la espera de "ver qué dicen los peritos". Sin embargo, el diario Perfil apunta a que "el siniestro se habría generado tras reventarse un neumático de la unidad, lo que provocó que chocara con el puente".