El hombre que ayer por la tarde se atrincheró en su casa en el barrio de As Lagoas puso fin a su encierro alrededor de las cuatro de la mañana. Tras cerca de 12 horas de tensión y amenazas con quitarse la vida, el hombre se encuentra en las urgencias Complejo Hospitalario de Ourense (CHUO) con heridas leves. Supuestamente se habría disparado, sin que el tiro le afectase a ningún órgano vital.

Tras el encierro podría haber un problema sentimental. Este vecino, de 60 años, se encerró en su casa sobre las 16 horas de ayer. El sexagenario, que portaba un arma, amenazó con quitarse la vida si no hablaba con su novia, con la que -al parecer- había discutido. Fueron los vecinos quienes alertaron a la Policía Nacional de la presencia de un hombre con una pistola en un balcón del inmueble número 8 de la calle Bernardo Cachamuíña.

De inmediato se realizó un amplio despliegue de la Policía Nacional, que incluyó tiradores de élite. Se acordonó la calle y se requirió la presencia de una ambulancia medicalizada del 061. Diversos mediadores, incluyendo a un hijo y un cuñado, intentaron en vano que el hombre depusiera su actitud y se entregase.