Un agente de la Guardia Civil fue detenido en la mañana de ayer después de que durante la madrugada del domingo efectuase once disparos en estado de embriaguez contra la vivienda de un vecino del municipio coruñés de San Sadurniño.

El suceso se produjo en torno a las 6.00 horas, cuando el agente franco de servicio se presentó ante el inmueble del hombre y disparó hasta un total de once veces contra la puerta y la ventana.

Según informó ayer la propia Guardia Civil, el agente estaba en estado de embriaguez y su reacción habría sido motivada por un incidente anterior que lo había enfrentado, durante las fiestas de Castro en Narón, con el hijo de los moradores de la vivienda atacada.

Nadie resultó herido por los disparos efectuados y solo hubo que lamentar daños materiales.

El agente fue localizado alrededor de las 9.00 horas de ayer. Tras ser detenido, pasará a disposición judicial acusado de un delito de amenazas con arma de fuego.