La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo rebajó la condena a cinco de los 18 acusados por el alijo de casi 3.000 kilos de cocaína procedentes de Venezuela en el buque Riptide, interceptado en mayo de 2013 en aguas del Atlántico. Entre los beneficiados por la sentencia están el vecino de Sanxenxo Antonio Carballa Magdalena y el vilanovés José Luis Viñas Morgade que ahora son condenados como "cómplices" en lugar de "autores" de un delito contra la salud pública, por lo que rebajan su pena en tres años y solo deberán cumplir siete años de prisión, y a dos multas de 150 millones de euros, cuando la Audiencia les impuso 800 millones.

También se benefician de la casación los acusados Nelson Beltrán Cejuela y Luis Miguel Iglesias Vila, que pasan a ser considerados "coautores del delito contra la salud pública de tráfico de cocaína en la modalidad de extrema gravedad en grado de tentativa", a la pena a cada uno de ellos de 4 años y 6 meses de prisión y dos multas de 100 millones de euros.

En el fallo también se reducen las penas de inhabilitación absoluta por la de inhabilitación especial durante el tiempo de la condena a Rogelio Collado Cespón, Juan Marcos Vigo Fernández, Juan Domingo Covelo, Iván Méndez López, Rafael Couto Oubiña y los cinco tripulantes indios del Riptide.

Procesados

La sentencia recurrida fue dictada en diciembre de 2015 por la Audiencia de Pontevedra y condenó a 17 de los 18 procesados en la operación dirigida por el buque de Vigilancia Aduanera Petrel el 29 de mayo de 2013. En el buque se hallaron 113 fardos que contenían 2.954 kilos de cocaína, que hubiera podido alcanzar el mercado el precio de 295 millones de euros

La sentencia se dictó tras un acuerdo con el vilagarciano Marcos Vigo Fernández, quien decidió colaborar con la Justicia para obtener los beneficios judiciales que corresponden a los arrepentidos. Por esta actitud y aunque en la sentencia se le considera el cabecilla de la operación, tuvo una menor condena que aquellos que no reconocieron su participación en los hechos, entre ellos Carballa y Vilas. Vigo fue condenado a nueve años de prisión y a sendas multas de 800 millones de euros, mientras que los dos anteriores habían sido sentenciados a diez, con la misma multa que el responsable de la organización criminal.

Estos dos acusados, que son los principales beneficiados de la casación, verán muy mejorada su situación procesal tras pasar de ser considerados autores a cómplices de un delito contra la salud pública y de hecho podrían tener próxima la salida de prisión al llevar cuatro años en situación de preventivos, por lo que solo les quedan tres por cumplir.

El Supremo tuvo en cuenta para la rebaja de la condena que Carballa Magdalena y José Luis Viñas habrían intervenido "en la operación de transporte con anterioridad a que el barco con la droga realizara la travesía desde Sudamérica a España con destino a las costas gallegas". E insiste en que Carballa "ayudó, sin duda, al principal acusado, Marcos Vigo, a encontrar desde un primer momento un grupo que se hiciera cargo de la cocaína y la transportara hasta España.