La Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil efectuó el pasado fin de semana un "importante despliegue de medios y efectivos" para velar por la seguridad vial durante la celebración de la XXXIII edición del Rally de Noia, durante el cual fueron interceptados cuatro conductores bajo los efectos de drogas y seis que dieron positivo en el control de alcoholemia.

Según ha informado el Instituto Armado, los controles dieron como resultado la detección de cuatro conductores con presencia de drogas en el organismo y otros seis dieron resultado positivo en las pruebas de alcoholemia. A ello se suman 74 denuncias por exceso de velocidad, y 64 denuncias a otros artículos y preceptos de la normativa de seguridad vial.

Más de 60 agentes de distintas Unidades del Subsector de Tráfico de A Coruña velaron por la seguridad vial los pasados 31 de marzo y 1 y 2 de abril, según destaca la Benemérita. Este dispositivo iniciado en los días previos y que se prolongó en las horas posteriores, según ha añadido, "permitió que el normal desarrollo de la prueba deportiva fuese lo más reseñable".

Ante la masiva asistencia de público a los distintos tramos del Rally fueron numerosas las patrullas que prestaron servicio de regulación del flujo circulatorio, "auxiliando e informando a los usuarios, tanto sobre los accesos a los tramos cerrados, como de los itinerarios más adecuados para el retorno a sus hogares", según concretan las mismas fuentes.

Igualmente se prestó especial atención a la seguridad en las zonas acotadas a la circulación por las que tenía que discurrir la prueba. "Supervisando las medidas adoptadas por los organizadores, garantizando la estanqueidad de los tramos cerrados a la circulación y la operatividad de las vías de evacuación", ha concluido.