El pasado mes de marzo, el Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Vigo prorrogaba su permanencia en prisión provisional y hoy le tomó una última declaración antes de que las partes personadas formulen sus escritos de calificación una vez se dio por terminada la investigación. El vigués de 42 años y celador de profesión en el Hospital Povisa, Carlos F.F., acusado de acuchillar brutalmente en el cuello a su exnovia causándole graves lesiones de las que la víctima pudo salvarse de forma casi milagrosa, acudió ayer a los juzgados para una última declaración ante la magistrada sustituta de la sala especialista en malos tratos.
Tras casi una hora de comparecencia, cuyo contenido no ha trascendido, el varón fue trasladado por la Guardia Civil de nuevo a prisión, donde ingresó el 14 de abril de 2015 por la presunta agresión a su exnovia, la misma que una vez en el hospital gravemente herida sacó fuerzas para identificar a su excompañero sentimental como presunto autor del ataque.
El acusado abandonó sobre las 11.10 horas los juzgados entre gritos de "¡Sinvergüenza!" y otros abucheos que le dedicaron una veintena de compañeros de la víctima.
