El director de la Agencia Federal para la Gestión de Emergencias (FEMA), Brock Long, dijo ayer que el organismo calcula que tendrá que alojar a más de 30.000 personas afectadas por el huracán Harvey en los refugios temporales abiertos en la ciudad de Houston y que se espera que más de 450.000 damnificados acudan para recibir asistencia. "Es una cifra muy alta, pero estamos listos para controlar la situación", declaró Long.

Miles de personas son atendidas en las decenas de refugios y albergues establecidos para quienes no pueden regresar a sus hogares, mientras continúan las llamadas a los teléfonos de emergencia para alertar sobre personas que se encuentran en peligro por las aguas.

El presidente de EEUU, Donald Trump, afirmó que "la recuperación será larga y complicada" tras el devastador paso del huracán en el sur de Texas, adonde viajó el martes para garantizar que los ciudadanos "reciben la ayuda necesaria".

Las autoridades de un condado cercano a Houston alertaron de que dos embalses de la zona se desbordaron por las lluvias torrenciales de la tormenta y ordenaron a los vecinos que evacuaran inmediatamente la zona. La Cruz Roja informó además de que 17.000 personas pasaron la noche en albergues en Texas a causa de las inundaciones que afectan al sur del estado.

La Organización Meteorológica Mundial (OMM) afirmó que el volumen de lluvias descargadas por Harvey a su paso por Estados Unidos está probablemente relacionado con el cambio climático. "El cambio climático significa que cuando hay un evento como Harvey, es probable que la cantidad de lluvia vaya a ser mayor de lo que hubiera sido en caso contrario", dijo la portavoz de la OMM, Clare Nullis.

"El cambio climático aumenta muy probablemente las lluvias asociadas", indicó, agregando que en algunas zonas el nivel de lluvia podría llegar a los 1,2 metros, lo que llevó al Servicio Meteorológico Nacional estadounidense a introducir un nuevo color en sus gráficos para hacer referencia a esta situación.

Por ello, Nullis apuntó que "el cambio climático no causa ciclones tropicales, siempre han estado ahí", añadiendo que "la relación entre el cambio climático y la frecuencia de los huracanes y ciclones tropicales no está clara, hay mucho que investigar en este sentido". Harvey es el huracán más potente que pasó por Texas en los últimos 50 años. El único precedente es Carla, que destruyó alrededor de 1.900 viviendas y la infraestructura de 1.000 empresas en 1961, de acuerdo con el Servicio Nacional de Meteorología.

Los tacones de Melania

Los tacones que el martes decidió calzar la primera dama de Estados Unidos, Melania Trump, al emprender su viaje a las zonas afectadas por el paso del huracán Harvey en el sur de Texas causaron gran revuelo, aunque cuando descendió del Air Force One cambió su atuendo y llevó calzado deportivo.

Las críticas inundaron los medios y las redes tras las imágenes en las que podía verse a Melania, antes de partir hacia Texas, caminando por los jardines de la Casa Blanca con el pelo suelto, unos zapatos de salón con altos tacones, unos pantalones pitillo, gafas de aviador y una chaqueta bomber color caqui.

La cadena de televisión CNN o el periódico británico The Mirror, se hicieron eco de la elección de armario de Melania, quien sin embargo, llegó a la ciudad texana de Corpus Christi vestida con playeras, el cabello recogido en una coleta y una gorra de béisbol. "La primera dama fue criticada por ponerse (unas gafas de) aviador y un par de tacones de aguja cuando empezó el viaje", dice el artículo del diario de Londres, titulado "la ropa más inapropiada que se podía imaginar".