La puerta destrozada de la casa de J.L.P.R. muestra los modos del grupo de tres personas -dos hombres y una mujer- que se presentó sobre las tres y media para exigirle, con violencia, el pago de una deuda que la víctima niega. "Se lo sacaron de la manga, se lo inventan", dice. Este vecino de Vilela -una parroquia de Cualedro con 64 habitantes- sufrió un robo violento por el que la Guardia Civil detuvo a una pareja -el juzgado los dejó en libertad, investigados por un delito de robo con violencia e intimidación-, mientras sigue la búsqueda del tercer implicado.

"Empezaron a reventar la puerta con el hacha, sin dar explicaciones. Abrieron con las llaves que estaban por dentro. Intenté refugiarme en la habitación pero destrozaron la puerta. Me amenazaron con un puñal y les pedí por favor que se llevaran lo que quisieran pero que no me hicieran daño. Me tiraron al suelo, me cogieron por el cuello, les dije que me estaban pinchando y me marché por la calle arriba. Pasé miedo", recordaba ayer la víctima.