Un virulento incendio forestal causó ayer al menos 18 heridos leves (17 de ellos bomberos) y obligó a evacuar a 300 personas de medio centenar de aldeas en la sierra de Sintra, en Portugal, una zona turística próxima a Lisboa. Doce horas después el fuego era controlado. En el lugar permanecen 730 bomberos, apoyados por 220 vehículos de extinción y siete medios aéreos que tratan de extinguir las llamas. La situación fue complicada durante la noche el sábado, según explicó la ANPC, debido a los vientos de hasta 100 kilómetros por hora registrados de madrugada.