Un jurado popular declaró ayer culpables a Roberto H. H. y Davinia M.G. de la muerte intencionada de Sara, la niña de 4 años e hija de la segunda que el 3 de agosto de 2017 murió en el Hospital Clínico Universitario de Valladolid al que llegó el día anterior agónica tras recibir una brutal paliza antes de ser violada vaginal y analmente. La fiscal ha mantenido la solicitud de prisión permanente revisable para el procesado por un delito de asesinato con agravantes de odio y ensañamiento. Para la madre de la pequeña ha pedido veinticinco años de cárcel.

Las cuatro mujeres y cinco varones integrantes del jurado responsabilizan a los dos encausados, por unanimidad, de la muerte violenta de la pequeña, en el caso de Davinia en la modalidad de comisión por omisión. Además, Roberto deberá responder por un delito de agresión sexual, cuatro delitos de maltrato con lesión y otro de maltrato habitual, todos ellos también por unanimidad del jurado. Davinia, amén de su responsabilidad por la muerte de su propia hija, ha sido acusada de tres delitos de maltrato con lesión y de otro de maltrato habitual, mientras que ha quedado libre de la agresión sexual padecida por Sara, del delito de abandono de la niña y de tres delitos de maltrato con lesión.

La pequeña falleció el 3 de agosto de 2017 en el Hospital Clínico de Valladolid, después de que los servicios sanitarios la asistieran en su casa de una parada cardiorrespiratoria. El día antes, cuando la madre de la niña se fue a trabajar „era cabo del Ejército„, el procesado violó a la pequeña, quien logró arañarle levemente en las manos y los brazos.

El jurado considera probado que Roberto H.H., a sabiendas de que la podía matar, la golpeó en distintas ocasiones, impactando su cabeza contra una superficie plana, agarrándola del cuello, causándole heridas por todo el cuerpo y arrancándole una uña de cada pie. También han dado por probado que el progenitor y dos tíos maternos de la niña observaron el 23 de junio de 2017 la existencia de hematomas en el cuerpo de Sara, entre otras partes en las nalgas y extremidades, una situación que comentaron a Davinia, quien no le dio importancia. El jurado considera probado que fueron causados por Roberto H.H. y que la madre de la pequeña sabía que su pareja podía llegar a causar tales lesiones a la menor y no la protegió.