Expulsan de su casa a los dos hijos de la mujer asesinada por su expareja en Valencia

El propietario del piso de alquiler ha cambiado la cerradura y no deja que la joven de 18 años y un menor de 16 accedan a su casa

Los dos hijos de la víctima junta a una pariente en la puerta de su casa de donde los han expulsado PERALES IBORRA

Los dos hijos de la víctima junta a una pariente en la puerta de su casa de donde los han expulsado PERALES IBORRA

Marina Falcó

Los hijos de la mujer asesinada por su expareja en Antella el pasado domingo no pudieron ayer acceder a su casa. Según explicó la hija mayor de la víctima Levante-EMV, los propietarios de la vivienda en la que están de alquiler, les prohibieron el acceso, además de cambiar la cerradura. En ningún caso una persona puede ser desalojada de su domicilio de esa manera y menos en el caso de unos menores que según recoge la ley, son víctimas de violencia de género y la legislación les protege.

A la inmensa desgracia de perder a una madre en semejantes circunstancias, queda el desamparo. Porque pese a que la hija de Ilham Najah tiene 18 años recién cumplidos, no cuenta con un puesto de trabajo actualmente aunque está dispuesta a «trabajar de lo que sea» para hacerse cargo de sus hermanos y quedarse en el domicilio que compartían con su madre.

Ilham, a quien los vecinos de la localidad llamaban María, tenía tres hijos, una chica de 18 años, y dos chicos: uno de 16 y otro de 12 que fue quien estuvo presente el pasado domingo cuando asesinaron a su madre. Porque no hay que olvidar que estos tres jóvenes perdieron a su madre hace apenas seis días asesinada por su expareja a cuchilladas.

A preguntas de este periódico, uno de los dueños del piso declaró que les permite «que entren a coger sus cosas pero que no se queden». El alquiler del piso de este mes de julio está pagado, pero aunque no fuese así, la ley es clara: para desalojar a unos inquilinos debe iniciarse un proceso de alzamiento a través de la justicia y no puede hacerse sin previo aviso, ni siquiera cortar los suministros del hogar como método de coacción.

El juzgado de Alzira que instruye el caso dio a la hija mayor de Ilham las llaves de la vivienda y los enseres de su madre ayer por la mañana. Cuando fueron al domicilio a limpiar la casa, que aún tiene huellas del asesinato y restos de la investigación realizada por los agentes de la Unidad de la Policía Judicial de la Guardia Civil, se encontraron con esta terrible sorpresa.

La hija mayor de Ilham explicó a este periódico que el hermano de 12 años sigue en casa de una vecina «que es como de la familia» y que tanto ella como su hermano mediano están en casa de un amigo de su madre, pero solo pueden quedarse unos días.

Los servicios sociales, explica la joven, les han ofrecido distribuirlos por centros de acogida aunque su deseo es que «no nos separen». La alcaldesa de la localidad manifestó a preguntas de este periódico que "al tratarse de un problema de particulares" no tenía conocimiento de lo que estaba ocurriendo entre los menores y el casero.

Una mujer cercana a la familia que les ha estado ayudando de forma desinteresada con todas las gestiones para repatriar el cuerpo de Ilham a Marruecos, de donde es originaria la familia, explicó que existen familiares que no viven en Valencia que se han prestado a echar una mano y que la comunidad islámica «no los vamos a dejar solos».

Vicente la mató a cuchilladas

El brutal asesinato machista ocurrido el pasado domingo en la localidad de Antellaconmocionó a la sociedad valenciana en general, pero a los vecinos de la localidad ribereña y los del municipio de Rocafort en particular. Vicente F. Q. de 53 años mató a cuchilladas a su expareja, Ilham Najah, de 38, en la vivienda de esta mientras se encontraban en el domicilio el hijo menor que ambos tenían en común.

La pareja, que se encontraba en trámites de separación, había estado residiendo en Rocafort hasta que la víctima dispuesta a cortar la relación, se había mudado a Antella donde trabajaba cuidando a personas mayores.

Según pudo saber Levante-EMV el día de este cruento asesinato, Ilham estaba disfrutando del domingo comiendo en casa junto a su hijo. Pero Vicente F. ya llegó con la intención de acabar con la vida de quien había sido su pareja desde hacía una década y madre de su hijo adoptivo de tan solo 12 años ya que portaba consigo un cuchillo jamonero con el que atacó a la víctima sin mediar palabra.