Tres enfermedades que se combaten comiendo jengibre

El jengibre es una raíz que tiene múltiples beneficios para nuestra salud

Estas son las tres enfermedades que el jengibre ayuda a combatir

Estas son las tres enfermedades que el jengibre ayuda a combatir / PEXELS

Abril Escalante

El jengibre, una raíz con una historia rica y versátil, ha sido apreciado a lo largo de los siglos por sus propiedades medicinales y culinarias. Desde tiempos antiguos, esta planta ha sido un elemento básico en la medicina tradicional de diversas culturas debido a sus beneficios para la salud. Su sabor distintivo y sus propiedades curativas lo convierten en un ingrediente invaluable en la prevención y tratamiento de diversas enfermedades.

Originario de Asia, el jengibre (Zingiber officinale) ha sido utilizado durante milenios en la medicina ayurvédica, china e incluso en la antigua Grecia y Roma. Se valora por sus propiedades antiinflamatorias, antioxidantes, digestivas y antibacterianas. Además, su sabor único lo ha convertido en un componente esencial en la cocina de muchas culturas, desde platos picantes hasta infusiones reconfortantes.

Esta raíz contiene una variedad de compuestos bioactivos, como gingerol, shogaol y zingerona, responsables de sus propiedades curativas. Ya sea consumido fresco, seco, en polvo, como té o incluso en aceites esenciales, el jengibre ofrece una amplia gama de beneficios para la salud.

Entre los beneficios más destacados del jengibre se encuentran su capacidad para aliviar las náuseas y mejorar la digestión. Numerosos estudios han demostrado su eficacia para reducir las náuseas relacionadas con el embarazo, la quimioterapia y la cirugía. Además, su acción antiinflamatoria lo hace útil para aliviar dolores musculares y articulares.

La capacidad del jengibre para mejorar la circulación sanguínea y reducir el colesterol lo convierte en un aliado para la salud cardiovascular. Asimismo, su potencial para fortalecer el sistema inmunológico lo ha convertido en un recurso valioso para combatir resfriados y gripe.

Desde el Consejo General de Colegios Farmacéuticos de Barcelona apuntan a que "de acuerdo con la farmacopea europea, la parte medicinal de la planta es el rizoma de Zingiber oficinale Roscoe. Es decir, el tallo subterráneo del Jengibre, disecado, entero o troceado, y con la corteza eliminada. Las propiedades medicinales del jengibre o "planta de los mareos o los vómitos", como también se la conoce, reside principalmente en las sustancias conocidas como gingeroles y sogaoles, siendo las más importantes el 6 gingerol y el 6 sogaol".

En su exposición el grupo de expertos también cita a la Agencia Europea del Medicamento (EMA) que "acepta el uso bien establecido del jengibre en la prevención de nausas y vómitos, del mareo del viajero. La EMA acepta como uso tradicional el tratamiento de los síntomas asociados a los trastornos digestivos asociados a la cinetósis. En concreto, los trastornos espasmódicos leves del tracto gastrointestinal incluyendo la distensión abdominal y flatulencia".

También referencian a la Sociedad Europea de Fitoterapia (ESCOP) que "incluye la indicación del rizoma de jengibre para la profilaxis de mareos y vómitos en el embarazo (siempre bajo la supervisión médica) y como antiemético postoperatorio en intervenciones quirúrgicas menores.

La principal ventaja del jengibre frente a otros productos, según explica Josep Allue, vocal de Plantas Medicinales del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Barcelona es que el consumo de esta raíz con fines medicinales no causa somnolencia.

Enfermedades cardiovasculares

ayudan a reducir el riesgo de enfermedades del corazón

Problemas digestivos

El jengibre es conocido por su capacidad para aliviar malestares estomacales. Ayuda en la digestión al estimular la secreción de enzimas digestivas y reducir la inflamación intestinal, previniendo así problemas como el síndrome del intestino irritable y la indigestión.

Náuseas y mareos

Desde el mareo por movimiento hasta las náuseas por quimioterapia, el jengibre ha demostrado ser eficaz en la reducción de estos síntomas. Su impacto positivo en el sistema gastrointestinal ayuda a controlar las sensaciones de malestar.