El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, cuestionó la limpieza del restaurante del que fue expulsada la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, en una zona rural de Virginia. El incidente tuvo lugar el viernes por la noche, cuando Sanders acudió junto a un grupo a cenar al restaurante Red Hen. Sin embargo, la propietaria se acercó a la portavoz presidencial y le instó a abandonar el local por su disconformidad con las políticas de la actual Administración. "El restaurante Red Hen debería centrarse en limpiar sus toldos, puertas y ventanas sucios (necesita una mano de pintura) en lugar de no servir a una buena persona como Sarah Huckabee Sanders", dijo Trump en Twitter.