El príncipe Guillermo, segundo en la línea de sucesión al trono británico, mostró ayer su emoción al visitar en Jerusalén el memorial del Holocausto, en la primera visita de un miembro de la casa real a Israel y los Territorios palestinos ocupados. El duque de Cambridge comenzó su visita en Yad Vashem, para obligada para cualquier representante oficial.